Declaración de la LIS: el Estado sionista será destruido y un Medio Oriente socialista se levantará de sus cenizas

Detrás de la ofensiva está el intento sionista de desalojar a las familias palestinas de sus casas en el barrio Sheik Jarrah de Jerusalén del Este.  Israel acelera sus pasos en línea con sus planes de no dejar ni el más mínimo espacio vital a los palestinos. Ahora avanza intentando trastocar la estructura poblacional de la ciudad de Jerusalén.

El pueblo palestino resiste una nueva ofensiva del Estado genocida de Israel desde el inicio del Ramadán en el mes de abril. La avanzada sionista se intensificó con represiones policiales desde este 7 de mayo, un brutal ataque a la mezquita de Al Aqsa el lunes 10 y el inicio de bombardeos a la Franja de Gaza en la madrugada del 11, que ha provocado hasta ahora la muerte de decenas de palestinos, 9 de ellos niños y niñas.

Sin embargo, sus esfuerzos para expulsar a los palestinos de Sheik Jarrah y reemplazarlos por colonos sionistas se encontraron con una feroz resistencia de decenas de miles de palestinos. La lucha contra la expulsión de las familias palestinas de sus hogares continúa desde hace semanas a pesar de los ataques de la policía israelí y los colonos de extrema derecha.

Desde el inicio del mes sagrado de Ramadán, Israel bloqueó el acceso a la plaza central de Jerusalén donde los palestinos se congregan al finalizar los ayunos diarios, iniciando dos semanas de choques que duraron hasta que la policía sionista tuvo que retroceder con la medida.

El 7 de mayo, las fuerzas israelíes volvieron a la carga, reprimiendo a miles de familias palestinas que rezaban en las inmediaciones de la Explanada de las Mezquitas; ataque que repitieron los siguientes dos días, hiriendo a cientos de palestinos que resistieron como pudieron.

La represión pretendía despejar la zona para que pasara la marcha del “Día de Jerusalén”, en la que los sionistas festejan su invasión de Jerusalén del Este de 1967. Pero los palestinos resistieron la embestida y a pesar de la represión impidieron el desalojo de la explanada, obligando al gobierno de Netanyahu a desviar la marcha sionista.

En la mañana del lunes 10, la violencia perpetrada por la policía israelí continuó brutalmente en la mezquita de Al Aqsa, el centro espiritual de la comunidad musulmana en Palestina. Dispararon indiscriminadamente, incluso adentro de la mezquita con balas de goma, gases lacrimógenos y bombas de estruendo.

Y este martes 11, la acción criminal continuo con un intenso bombardeo en la Franja de Gaza que ha dejado decenas de muertos y que el racista y asesino Netanyahu amenaza con intensificar.

Muchos estados musulmanes condenaron simbólicamente los ataques de Israel. Entre ellos se encuentran los estados árabes títeres que han hecho acuerdos de amistad con Israel, y Turquía bajo Erdogan, que está trabajando duro para establecer relaciones con Israel.

Desde la Liga Internacional Socialista repudiamos esta nueva agresión criminal de Israel y llamamos a la más amplia movilización y solidaridad internacional en apoyo al pueblo palestino.

Otra vez queda demostrado que ninguna solución es posible sin la destrucción del Estado genocida de Israel. Hasta que Israel se derrumbe y el imperialismo y sus colaboradores, los déspotas locales, sean derrotados, ni los trabajadores ni las naciones oprimidas como los palestinos podrán ser liberadas.

La liga internacional socialista defiende el derecho a una palestina única, democrática, laica y no racista, con su capital en Jerusalén. El único reaseguro para los pueblos oprimidos es el socialismo.

Por eso tenemos que encender el fuego de la revolución en Oriente Medio y en todo el mundo. Si trabajadores, jóvenes, mujeres y pueblos oprimidos se unen y luchan contra el capitalismo imperialista, entonces podremos disfrutar de una vida libre, feliz y con igualdad.

¡Viva la heroica resistencia del pueblo palestino!

11.05.2021

Declaración de la LIS: solidaridad con la rebelión colombiana

  1. El paro nacional del 28 de abril en Colombia se transformó en una rebelión generalizada. El pueblo trabajador, con los jóvenes a la cabeza, se levantó contra la Reforma Tributaria del gobierno de Iván Duque y le asestó una primera e importante derrota. Tras cinco días de movilizaciones masivas y enfrentamientos, Duque se vio obligado a retirar la Reforma Tributaria y renunciar a su ministro de Hacienda, pero el pueblo sigue en las calles exigiendo cambios de fondo, la caída de todo el plan del gobierno y la renuncia del propio Duque.
  2. El paro nacional de noviembre de 2019 puso a Colombia a tono con el ascenso de rebeliones y revoluciones que sacudió a Latinoamérica ese año. Aunque la pandemia de Covid19 impuso una pausa en el proceso, de ninguna manera acabó con él. Hoy la movilización se retoma y Colombia se ubica a la vanguardia del continente junto con Chile y como en su momento lo estuvieron Ecuador, Bolivia o Perú y Paraguay recientemente.
  3. Duque respondió a la pueblada del 28A con una brutal represión. El Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) y las fuerzas parapoliciales al servicio del gobierno no han dudado en disparar con armas de fuego contra las manifestaciones. Al día de hoy se cuentan 27 manifestantes asesinados y pueden ser muchos más. Hay al menos 124 heridos y cientos de detenidos. Pero la represión no ha logrado derrotar al pueblo movilizado, que ha levantado cortes y barricadas día tras día, superando la brutal represión.
  4. El anuncio del retiro de la Reforma Tributaria y de la renuncia del ministro de Hacienda tampoco lograron conformar al pueblo en rebelión. Exigen la caída de todo el paquete de medidas que el gobierno de Duque acordó con el FMI, la OCDE y el Banco Mundial; y la renuncia de Iván Duque.
  5. Los cortes y barricadas en Cali, el epicentro de la pueblada, han impuesto una parálisis de hecho del transporte y la actividad económica de la ciudad. Masivas movilizaciones se suceden en Bogotá, Medellín y en toda la geografía colombiana. La presión ha obligado a las centrales sindicales nucleadas en el Comité Nacional de Paro a convocar nuevas movilizaciones.
  6. La oposición burguesa de derecha -cambio radical- y las fuerzas de centroizquierda -Pacto Histórico de Gustavo Petros y la coalición de la Esperanza de Sergio Fajardo- apuestan al diálogo con Duque y a canalizar el proceso hacia las elecciones presidenciales de 2022. La burocracia sindical que comanda el Comité Nacional de Paro mantiene la movilización por la presión por abajo, pero también apuesta a la negociación con el gobierno, no a la caída del mismo que el pueblo demanda.
  7. Impulso Socialista, sección colombiana de la LIS, sostiene la profundización de la movilización hasta que caiga Duque y la convocatoria a un Encuentro Nacional de Paro donde se nucleen los trabajadores en lucha y las Asambleas populares que se están desarrollando en las distintas regiones del país para coordinar e impulsar la continuidad de la movilización, discutir un programa para resolver la crisis económica y sanitaria y erigirse como alternativa de poder y de gobierno.
  8. Desde la Liga Internacional Socialista nos solidarizamos con el pueblo colombiano movilizado; repudiamos la brutal represión del gobierno de Duque, exigimos una investigación independiente y juicio y castigo a los responsables de la misma; nos sumamos al reclamo por la caída del paquetazo de Duque y la renuncia de su gobierno; y apoyamos las propuestas de Impulso Socialista por el no pago de la deuda externa, la nacionalización de la banca y el comercio exterior, la implementación de impuestos progresivos a las grandes fortunas, la eliminación del IVA de la canasta básica, un aumento general de salarios y una renta básica a la desocupación y la necesidad de la autoorganización democrática del pueblo trabajador y sectores en lucha, en la perspectiva de un gobierno de trabajadores.
  9. Se impone organizar la solidaridad internacional y llevarla a la acción. Desde la LIS nos comprometemos a lanzar de inmediato una campaña de pronunciamientos, difusión en redes sociales y acciones en las embajadas y consulados de Colombia de cada país, en repudio a la represión de Duque y en apoyo al pueblo colombiano y sus demandas.