La rebelión toca nuestras puertas, acudamos a su llamado

La rebelión toca nuestras puertas, acudamos a su llamado

Este artículo los escribimos para debatir y polemizar con las fuerzas políticas que actúan en el país, sobre todo, con los miles de militantes y luchadores sociales honestos. Todos tenemos acuerdo en sacar a la ANR, pero ¿Cómo lo hacemos? ¿Con qué lo reemplazamos? Aquí el aporte que hacemos desde Alternativa Socialista.

Una rebelión en curso, contra la ANR y contra el que se ponga en el camino

En nuestro país ya nada volverá a ser igual que antes del viernes 5 de marzo. Ese día las masas se volcaron a las calles a exigir la renuncia de Mario Abdo Benítez y a dejar en claro que la ANR nunca más debe gobernar. Horas antes del estallido, en un intento desesperado por desalentar la movilización callejera, el gobierno colorado ofreció al pueblo la renuncia de Mazzoleni. No alcanzó con eso. Diez mil almas salieron a las calles. Cuando comenzó la represión el pueblo ejerció su legítimo derecho a la autodefensa, la policía retrocedió. Todxs vimos cómo la policía cobarde huía de los cascotazos. Salieron a pedir la paz.

Al día siguiente, Mario Abdo, debilitado, pendiendo de un hilo, ofreció la renuncia de otros tres ministros claves. A pesar de eso la movilización se sigue desarrollando. Día tras día, a veces con mayor participación y otras veces con menos gente, el pueblo paraguayo sale a cortar rutas y calles, escrachan las viviendas de gobernadores, diputados, del presidente y hasta la de Horacio Cartes. Se suman lxs campesinxs, lxs trabajadores, los pueblos originarios, mujeres y estudiantes. Todxs bajo un solo grito: “Fuera Marito”. 

Esa ANR que impuso una dictadura de terror durante 35 años y que siguió gobernando durante la “transición democrática” hoy está siendo juzgada por millones. Se está saldando una deuda histórica. La ANR y los militares nunca fueron juzgados por los crímenes de lesa humanidad que cometieron contra miles de trabajadores, mujeres y campesinxs. Que la atención y la acción de las masas se centre en juzgar y exigir la desaparición política de ese partido, se explica únicamente porque se está desarrollando una revolución en la conciencia de millones. 


Sobre juicios políticos, golpistas y elecciones anticipadas.

Existe un debate con el PLRA y el Frente Guasú, con ellxs tenemos acuerdo en la necesidad de tirar al gobierno de Mario Abdo. Pero no tenemos acuerdo en cómo tirarlo. Ambos plantean una salida institucional a la crisis: Juicio Político y elecciones anticipadas. Tienen un problema: necesitan los votos de Horacio Cartes. La misma casta política que se aumenta los salarios de privilegio en medio del colapso sanitario durante la pandemia pretende mejorar el país y con la ayuda de un narcotraficante, parece un mal chiste. 

No olvidemos que el parlamento es una cueva de bandidos. Allí dentro conviven los golpistas que en 2012 sacaron a Lugo, con una feroz alianza entre el imperialismo norteamericano, la burguesía brasileña, Monsanto, la ANR y el PLRA (entre los que figura Efraín Alegre) montaron un fraude contra el pueblo paraguayo. Hablamos de ese congreso en el que abundan los narcos, de los que votan presupuestos de miseria, los que se enriquecen a costa del pueblo y nunca se preocuparon por la situación de los millones de paraguayos. Recién ahora, que el pueblo se decidió a acabar con los colorados, ellos se acuerdan que hay que sacarlos del gobierno. Serán éstos mismos, quienes se postularán en unas posibles elecciones anticipadas. Claramente, este no es el camino para reconstruir Paraguay. 

El Paraguay Pyahura y la FNC en su laberinto.

Nosotrxs respetamos a la Federación Nacional Campesina. Tienen décadas de estar luchando por la tierra en todo el país, recuperando cientos de hectáreas, construyendo asentamientos y promoviendo la agricultura familiar campesina con métodos agroecológicos. Pero también queremos debatir con su dirección, que adhiere al Partido Paraguay Pyahura. Tenemos acuerdo en que queremos construir un nuevo Paraguay, también acordamos en que el camino no es con los reformistas. Cada año, cuando impulsan su Gran Marcha Campesina apoyamos su lucha, su justo reclamo por tierra y el derecho a una vida digna. Pero nos parece un error que ignoren la actual situación política del país. 

Todos los años viniendo a Asunción a reclamar, pero justo el año en que Asunción se encuentra convulsionada deciden mirar para el costado. No podemos esperar al 25 de marzo para marchar. Lo peor de todo: ¡Su centro es coronel Oviedo! Se convocan a 150 kilómetros del centro político del país. Este es el momento en que los miles de campesinos luchadores adherentes a la FNC deben venir a sitiar Asunción. Tienen experiencia en cortar rutas, puentes internacionales y resistir ante la represión policial. Es hora de unir a la ciudad con el campo. En la ciudad miles de trabajadores y estudiantes están pidiendo a gritos que los gremios campesinos lleguen a Asunción a sumarse a la lucha contra la ANR y Mario Abdo. Basta de tregua, este es el momento.

¿Dónde están las centrales obreras y los sindicatos?

En 2014 se desarrolló una importante huelga general contra el ex presidente Cartes. En noviembre de 2015 las federaciones de trabajadores del transporte público organizaron una poderosa huelga que paralizó Asunción, Los docentes dieron grandes batallas en los años anteriores, toda la clase obrera estuvo peleando de manera aislada por aumento de salario y mejores condiciones de trabajo, existe experiencia de lucha y un piso de conciencia acumulada, pero hoy, están ausente todas las direcciones. 

Los poderosos sindicatos docentes de la FEP y la UNE SN no han salido aún al combate ademas el dirigente de la FEP convoco a unirse a la caravana para salvar a Abdo. No vemos a los miles de afiliados al SITRANDE salir a las calles con sus dirigentes a la cabeza. Si con 10.000 autoconvocados el gobierno de Mario Abdo pendía de un hilo, con la Huelga General caen todos. Las centrales obreras como la CUT y la CUT-A apenas se han dedicado a sacar comunicados, pero no han convocado a sus sindicatos afiliados a un congreso de emergencia para debatir la crítica situación del país. La CNT, pareciera que no existe, están guardados bajo siete llaves.

La clase obrera debe ser parte del proceso político que se está desarrollando. ¿Acaso la clase obrera no sufre el colapso sanitario que afecta al país? ¿Acaso no tenemos hermanos, hijos y madres que estén sufriendo esta situación? Los gremios de la clase trabajadora debemos acudir urgente a luchar por cambiar la realidad. Urge que la clase obrera desborde a su dirección, que los delegados de base convoquen a asambleas por lugar de trabajo. En cada escuela, fábrica o empresa debemos convocar a asambleas y comités de huelga. Más que nunca está planteado convocar a la Huelga General indefinida, hasta que caiga el gobierno. Sobran fuerzas para ello.

¿Cómo deshacernos de los colorados?

Para nosotros la salida no es el juicio político, ya explicamos arriba que no confiamos en las instituciones que durante décadas toleraron las injusticias y los crímenes cometidos por el partido colorado. Tampoco creemos que deban gobernar los opositores a la ANR. El FG y el PLRA son parte de la casta política y del régimen existente. Si cae el gobierno, se cae el régimen actual y con ello caen todos. No en vano el pueblo canta “Que se vayan todos, que no quede ni uno sólo”. No se trata de un simple canto, es una consigna de lucha, es una decisión política. Por eso que el FG y el PLRA buscan la salida institucional. Hace unos días el más progresista del PLRA, Víctor Ríos, tuiteó: “En Py las soluciones deben darse ahora, de lo contrario, la pueblada nos puede llevar a todos por delante”. Tiene razón, por eso se apresuran a presionar a Horacio Cartes. Para que saquen a Mario Abdo por la vía legal y así salvar el status quo. 

Para el miércoles 17 de marzo se están convocando a Asunción organizaciones campesinas, algunas ligadas al Frente Guasú y otras no. Sus direcciones querrán desviar el descontento social hacia el juicio político, pero existen las posibilidades que, una vez caído el gobierno colorado, las masas no se detengan en su lucha y avancen hacia sus reclamos históricos, más profundos que deshacerse de un gobierno indeseado. 

Los militantes de Alternativa Socialista buscamos otra salida. Creemos que sobran las fuerzas para echar a los colorados y a toda la casta política que gobierna para los terratenientes, banqueros y las corporaciones multinacionales. Pero eso lo vamos a lograr con los métodos de lucha de la clase trabajadora: la huelga general indefinida. Insistimos en la necesidad de convocar a asambleas democráticas y resolutivas en cada lugar de trabajo, en cada fábrica, en cada barrio, en todas las comunidades, pueblos y asentamientos. Una poderosa huelga general encabezada por la clase trabajadora con el campesinado, los estudiantes y todo el pueblo, movilizados en las calles es la herramienta más contundente con la que contamos para acabar con la hegemonía colorada. Quiénes tienen la potestad de hacerlo y no lo están haciendo están salvando a la ANR de su derrumbe y serán derrumbados con ella si no giran el timón. Las federaciones y sindicatos que no se están poniendo a la cabeza de la lucha cuando tienen posibilidades de hacerlo están explícitamente traicionando la lucha del pueblo paraguayo, que de manera autoconvocada está en las calles reclamando.

Gobierno de los trabajadores y el pueblo. La salida es el socialismo

Si el pueblo se quiere deshacer de la ANR es porque no tolera la actual situación de las cosas. Detrás de “Fuera Marito” están los deseos de una salud pública de calidad con vacunas para todos, una educación accesible para todos, trabajo sin explotación, tierras para el campesinado pobre, el fin de la represión y tantos otros reclamos urgentes del pueblo. Esas demandas, todas, chocan con los límites del sistema capitalista. Es decir, es necesario tomar medidas socialistas. 

Para garantizar vacunación masiva es necesario anular las patentes y declarar de utilidad pública todos los laboratorios, contratar científicos y técnicos expertos en vacunas para poner en marcha la producción pública de millones de vacunas contra el coronavirus, que se entreguen de manera gratuita e incluso una vez inmunizado a todo el país, ponerse a exportar a otros países que necesiten nuestra ayuda. Para garantizar tierra para los campesinos es necesario recuperar las tierras mal habidas, poner en marcha la reforma agraria y repartir la tierra, hay que prohibir los transgénicos y agrotóxicos, imponer un modelo agroecológico, que no contamine la naturaleza ni envenene a nuestros pueblos. Para garantizar pleno empleo es necesario reducir la jornada laboral a la mitad de lo que hoy se trabaja, lo cual permitiría contratar en cada empresa el doble de los trabajadores actuales, garantizando salarios igual al costo real de la vida. Para que las familias bañadenses no sean más afectadas por la crecida del río y se termine la miseria hay que construir la franja costera, asfaltar las calles, construir escuelas, hospitales y miles de viviendas para acabar con los hogares precarios, eso implica un plan de obras públicas que generaría miles de puestos de trabajo y además activaría la economía y la industria productiva. Para acabar con la violencia machista hay que exigir presupuesto y ley de emergencia, educación sexual integral en todos los niveles educativos, castigos a femicidas, guarderías estatales, igualdad salarial. Así podemos ir con cada reclamo de los distintos sectores populares que están luchando. 

¿Cómo financiamos ese plan que parece utópico? En nuestra opinión NO es necesario tomar deuda externa a tasas usurarias e impagables. Creemos que en Paraguay hay riquezas, hay dinero, pero está concentrado en pocas manos. Unos pocos terratenientes, ganaderos, banqueros, narcotraficantes y empresarios concentran gran parte de la riqueza nacional. Es necesario tocar sus intereses. Ese 1% todopoderoso y multimillonario se enriquece a costa de millones de trabajadores empobrecidos, llegó la hora en que la tortilla se vuelva y nos devuelvan todo lo que nos han robado durante décadas en complicidad de la ANR y la casta política. 

Algunos nos dirán que el poder corrompe, que los políticos tienen privilegios. Eso también tiene su vacuna. Es necesario acabar con esta ilusión de democracia, que se limita a votar cada 5 años. En nuestra opinión debemos gobernar los trabajadores, por eso queremos convocar a una asamblea constituyente, con miles de diputados obreros y campesinos que debatan en igualdad de condiciones y con democracia real, directa y participativa el rumbo del país. Además, en un gobierno de trabajadores deben ser anulados todos los privilegios. Los políticos deben cobrar un salario igual al de un médico o director/a de escuela, es decir un salario igual al costo de vida. Además, los gobernantes y sus hijos deben usar los hospitales y escuelas públicas, los cuáles no deberían encontrarse en la situación actual. Hay que activar la revocabilidad de mandato, sin grandes procesos burocráticos para destituir a quienes incumplan con el pueblo. Máximo dos periodos de mandato y después deben volver al trabajo. 

Construyamos una Alternativa Socialista

Llamamos a que toda la militancia honesta del FG, el PLRA, el PPP, a los afiliados a los sindicatos de trabajadores y a las federaciones de campesinos, a los miles de autoconvocados, a los independientes, a las mujeres y a los estudiantes a que reflexionen sobre la coyuntura nacional. Este es el momento para tomar el destino de nuestro futuro en nuestras manos. La historia golpea nuestras puertas y ventanas, hay que acudir a ella. Es momento de que nos pongamos de pie para reconstruir el Paraguay que siempre soñamos. No estamos solos, hacemos parte de una organización mundial, la Liga Internacional Socialista, presente en más de 30 países de 5 Europa, Asia, América, Medio Oriente y Oceanía. 

Invitamos a quiénes nos leen a que debatan en sus organizaciones sobre estos temas, a que se abran a debatir con nosotros y, sobre todo, a animarse a construir una organización política revolucionaria, porque únicamente con una revolución podremos cambiar al país. Esta rebelion ya inició el 5 de marzo, depende de nuestra acción militante hacer que llegue hasta el final.

Primer dia de movilizaciones cerca de 15mil personas salen a las calles espontáneamente